bitácora personal de diseño y programación

lunes, julio 03, 2006

¡El Rey ha muerto, muera el Rey!

Terminaron las campañas electorales en México. Con el 98% de las actas computadas, el resultado de la elección parece favorecer al PAN por más de 400,000 votos por encima del PRD. No dudo que en los próximos días comiencen a rabiar los locutores, comentaristas y articulistas simpatizantes de López Obrador en contra del EZLN y de La Otra Campaña, ellos seguramente van a querer responsabilizar al Sup Marcos de la probable pérdida de las elecciones del PRD. Que dividió a la izquierda, que confundió a la ciudadanía, que colaboró con la derecha, que es un instrumento de Salinas... y esto lo harán no tanto por desquite o por desahogar sus frustaciones. Lo van a hacer para evitar tener que reflexionar, en público, sobre los motivos por los cuales AMLO no pudo tener un amplio margen de votación por encima al PAN, es decir, cómo es que los electores apenas lograron distinguir entre PAN y PRD, porque no parece creíble que 13 millones de personas sean apoderadas clases altas que estén buscando salvaguardar sus intereses capitalistas... Es complicado entender que es lo que ocurre en la mente de cada persona cuando está con la boleta en frente, el voto es un acto individual, personalísimo. Intentar encuadrar esta votación en un fenómeno social quizás sea caer en un error. Lo cierto es que gane Felipillo o gane el "Señor López", las cosas van a andar igual. Y es que no se trata, como decía Almeyra, de que con Calderón habrá más Atencos, y que con Obrador habrá menos "Acteales"... en la otra campaña ya no miramos arriba y no nos conformamos con la pantomima de "libertad" de elegir al tirano en turno, uno que golpee menos, o uno que finja ser "cuate". Ya nuestras aspiraciones de cambio son superiores a las que rondan las boletas electorales. Gane quien gane, nosotros diremos: ¡El Rey a muerto, muera el Rey!